Tabla de especies de árboles por prácticas de conservación.

Prácticas de conservación en Puerto Rico e Islas Vírgenes

1. Restauración de hábitat para la vida silvestre

Se establece para proveer alimento, refugio, área y/o sustrato para anidaje y reproducción a la vida silvestre (aves, reptiles, anfibios y mamíferos). Su propósito es utilizar especies de árboles nativos para mejorar las condiciones de hábitat de la vida silvestre en remanentes de bosques o hábitats fragmentados. También se establece en áreas deforestadas en donde el objetivo de la restauración está enfocado en restablecer hábitat para la vida silvestre. Esta práctica también puede ayudar a formar corredores ecológicos entre áreas agrícolas, urbanas y/o bosques y provee beneficios adicionales como mejoras en la calidad de aire, agua y suelo.

2. Franja de amortiguamiento ribereño

Su objetivo es estabilizar y proteger los suelos aledaños a ríos y/o quebradas, con el propósito de reducir la cantidad de sedimentos y contaminantes que llegan a los mismos y a su vez mejorar la calidad del agua. También tiene beneficios sobre la calidad del aire y proporciona hábitat para la vida silvestre, tanto terrestre como acuática, al proveer alimento, refugio y microclimas favorables. La distancia de esta franja desde el borde del cuerpo del agua debe establecerse bajo la recomendación de un especialista en restauración, tomando en cuenta el objetivo específico de la práctica de conservación. También deben considerarse otras variables como la pendiente y exposición del terreno, y el uso del suelo en la finca.

3. Restauración y protección de costas

Se utiliza para promover estabilidad en las costas y ayudar a reducir erosión en los sistemas costeros, incluidas lagunas, bahías, playas, dunas costeras y acantilados. Esta práctica también tiene un efecto positivo en la vida silvestre en ecosistemas costeros al proveer refugio y alimento. Es recomendable incluir la combinación de árboles, arbustos y bejucos para que funcionen como barrera rompevientos, a la vez que ayuden a crear estabilidad en la costa mediante sus sistemas de raíces. También puede ayudar a proteger áreas de cultivos localizados en la costa.

4. Setos vivos y barrera rompevientos

Se establecen para brindar protección a los cultivos agrícolas en áreas expuestas a vientos fuertes. Puede establecerse para separar predios de siembra, para marcar colindancias o para la rotación de áreas de pastoreo. Se recomienda utilizar especies que desarrollan raíces profundas, que suelen ser de crecimiento lento, ya que en sus primeros años desarrollan sus sistemas de raíces. También provee beneficios secundarios al brindar refugio y alimento para la vida silvestre, así como áreas de sombra para el ganado. Esta práctica también funciona para establecer corredores biológicos entre zonas de cultivo y áreas boscosas.

5. Sistema agroforestal

Combina la siembra de árboles con la producción agrícola y ganadera. Se recomienda para mejorar el hábitat de la vida silvestre, estabilizar el suelo, reducir la sedimentación de cuerpos de agua, proveer sombra parcial a cultivos, y brindar beneficios en la ganadería como sombra para el ganado y forraje. El establecimiento de esta práctica provee la oportunidad a los propietarios de terrenos agrícolas p a r a diversificar su produción anual. Los sistemas agroforestales más utilizados en Puerto Rico y las Islas Vírgenes Americanas, son:

a. Sistema agroforestal de café bajo sombra

Esta práctica consiste en el uso combinado de árboles nativos en áreas de cultivo de café buscando establecer una estructura parecida a la del bosque. En los últimos años, en Puerto Rico, esta práctica ha sido establecida en numerosas fincas bajo programas de conservación del FWS y del NRCS. También puede utilizarse para establecer áreas demostrativas para actividades de ecoturismo o educación ambiental (Vea infografía: Modelo Sistema Agroforestal de Café Bajo Sombra).

b. Sistema silvopastoril

Combina la siembra de árboles nativos en áreas con pastos, con el propósito de obtener beneficios sobre la producción animal y forestal. El establecimiento de esta práctica ayuda a manejar áreas degradadas por el pastoreo intensivo. Las especies recomendadas incluyen leguminosas que fijan nitrógeno al suelo. Los árboles pueden ser de especies de árboles nativos que provean frutos, forraje, sombra y albergue al ganado y también que provean hábitat para la vida silvestre, incluyendo polinizadores.